DIA 6: MARTES 23 JUNIO 2009
Era nuestro sexto día en la ciudad, y aunque parezca mentira todavía nos quedaban bastantes cosas interesantes que visitar. Quizás se pueda ver lo imprescindible en cuatro días, pero si le dedicas una semana a esa ciudad os aseguramos que no os vais a aburrir.
Hoy como visitas principales teníamos previsto entrar al Palacio de Dolmabahce, subir a la Torre Galata y vivir el ambiente nocturno del barrio de Ortaköy.
Cogimos el tranvía T1 desde la parada de Sultanahmet hasta la parada de Tophane, ubicada en el distrito de Beyoğlu.
Aquí vimos la Fuente Tophane, del S. XVIII y estilo rococó. Cumple una doble función: abastecer de agua a cualquier viajero así como fuente de abluciones para los rezos:
Al lado, se encuentra la Mezquita de Kilic Ali Pasa, construida en el S. XVI por el arquitecto imperial Sinan. En realidad es un complejo compuesto por madrasa, türbe (mausoleo o tumba), fuente y mezquita.
La mezquita tiene una curiosa anécdota relacionada con Cervantes. Kiliç Ali en realidad es el nombre elegido tras convertirse al islam, al ser apresado por piratas bereberes, por parte de un marino italiano llamado Giovanni Dionigi. Alcanzó gran reputación como marino, llegando a ser gobernador de Argel y nombrado Gran Almirante por orden del sultán Solimán, que como veis, aparece en todos lados al igual que Sinan. Con este cargo, participó en la Batalla de Lepanto y conoció a Miguel de Cervantes durante el presidio de éste en Argel. Cuando posteriormente escribió El Quijote, Cervantes caracterizó a Kilic Ali para definir el personaje de Uchalí.
Exteriormente guarda semejanza con Santa Sofía, aunque sólo tiene un minarete:
Interiormente consta de una única galería, con una cúpula de 12 metros de diámetro:
Volvimos a coger el tranvía T1, y un poco más adelante vimos la Mezquita Nusretiye, bastante más moderna que la anterior (S. XIX) y decoración barroca:
Nos bajamos en la parada de Kabatas, la más próxima al Palacio de Dolmabahce.
Aunque antes de llegar a él, visitamos la Mezquita de Dolmabahce, construida a mediados del S. XIX, lo cual se aprecia a simple vista en el interior, respecto a otras mezquitas diseñadas siglos antes por Sinan:
La mezquita está pegadita al mar, y se aprecia muy bien exteriormente con algunos rascacielos al fondo si realizas algún crucero por el Bósforo.
A continuación de la mezquita, aparece el Palacio de Dolmabahce, menos visitado que el Palacio de Topkapi, pero también muy interesante. Fue residencia oficial de los sultanes desde que éstos abandonaron el Palacio de Topkapi en 1853.
En mitad de Jardín Imperial, se encuentra situada la Fuente de los Cisnes:
Los jardines son bonitos, ubicados también a orillas de mar. Aquí se encuentra la Torre del Reloj, fabricado por el relojero francés Jean-Paul Garnier:
Quizás lo que más destaque de los jardines, es la espectacular Puerta Imperial:
Interiormente visitamos la zona del Selamlik(dependencias oficiales imperiales). Antes de entrar al Salón de Ceremonias se encuentra la joya del palacio, una impresionante lámpara de 4,5 toneladas, obsequio de la reina Victoria de Inglaterra. También es muy vistosa y original la escalera de cristal con forma de doble herradura y cristal de Baccarat:
La visita continúa visitando más salas donde los sultanes recibían a las visitas oficiales y decoradas con lámparas espectaculares:
Si sólo hay tiempo o presupuesto para visitar un palacio, sin duda debes visitar el de Topkapi, pero éste también es interesante.
Pegado al palacio, se encuentra el estadio del Besiktas, antiguo Inönü y actualmente llamado Vodafone Park:
Desde aquí andamos 1 km por la Inonu Caddesi hasta llegar a la Plaza Taksim, uno de los puntos de encuentro de la ciudad. Durante toda nuestra visita se encontraba vallada por la policía, ya que suele ser lugar habitual de manifestaciones como pasa con la Plaza Tahrir de El Cairo:
Por la zona, y muy cerquita de Taksim, visitamos Aya Triada (Iglesia de la Santísima Trinidad), una iglesia ortodoxa griega del S. XIX de estilo neobarroco:
Comimos en un restaurante de comida tradicional, muy bien decorado, llamado Gani Gani (Taksim Kuyu Sok, 11). Por desgracia, creemos que hoy en día está cerrado:
Después recorrimos toda la Istiklal Caddesi, una de las calles más famosas y animadas de la ciudad. Como os comentábamos en posts anteriores, la zona está salpicada de calles repletas de restaurantes, tabernas y cafeterías: Sahne Sokak (Mercado de la Pesca), Nevizade Sokak ó Cicek Pasaji (Pasaje de las Flores).
Por el camino visitamos la Iglesia de San Antonio de Padua, de estilo neogótico y culto católico:
Y también descubrimos una romántica calle en cuesta, repleta de cafeterías y restaurantes inspirada en los cafés franceses, llamada Cezayir o Fransiz Sokağı (Calle de los Franceses):
Cezayir Caddesi, Estambul, Turquia
Andando, andando, llegamos hasta la zona de Karaköy/Galata. Aquí visitamos la Torre de Galata (Galata Kulesi), una torre reconstruida en el S. XIV por los genoveses, donde más que la altura (67 metros) destaca la robustez y anchura de sus paredes:
Subir a lo alto de la torre se ha convertido en una atracción bastante popular, debido a que es un excelente mirador panorámico sonbre las mezquitas de la otra orilla: Solimán, Nueva, Azul ó Santa Sofía. Recomendable subir si te quieres llevar una de las estampas mas típicas de la ciudad:
Para hacer un alto en el camino, elegimos una de las cafeterías más conocidas en Estambul: Karakoy Gulluoglu (Rıhtım Cad. Katlı Otopark Alt, 3). Su especialidad son las baklavas, seguro que las has probado alguna vez, son esos dulces típicos elaborados con pasta de nueces (u otros frutos secos como avellanas, almendras o pistachos) y bañadas en almíbar. Están riquísimos, y en este sitio los hacen de vicio, es uno de los más famosos de la ciudad:
Tras reponer fuerzas, nos desplazamos hasta el barrio de Ortaköy, para ello fuimos andando hasta Karaköy. Allí tomamos el bus 30D, que en teoría en media hora llega a Ortaköy, pero nosotros cogimos un atasco tremendo, y tardamos más de una hora en llegar.
El centro neurálgico del barrio es la Mezquita Mecidiye, una preciosidad. Su estampa con el Puente del Bósforo iluminado detrás es uno de los mejores recuerdos que nos llevamos de Estambul:
La mezquita actual fue mandada construir por orden del sultán Abdulmayid I a mediados del S. XIX:
Parece ser que los sultanes que tenían su residencia en el Palacio de Beylerbeyi, en la zona asiática de la ciudad al otro lado del Bósforo, venían a esta mezquita a rezar en góndola.
El interior es muy bonito, con mármoles de tonos rosados y blancos. La caligrafía en árabe es propia del mismo sultán ya que era un excelente calígrafo:
Para imitar un poco a los locales, compramos un kumpir (patatas asadas a las que puedes añadir ingredientes) en un puesto callejero y nos la tomamos a la orilla del Bósforo:
Era ya de noche y todavía había trasiego de barcos:
Para volver, cogimos de nuevo el bus 30D hasta Tophane y ahí cambiamos al tranvía T1 hasta Sultanahmet, y como siempre nos echabamos una foto en esa preciosa plaza:
DIA 7: MIERCOLES 24 JUNIO 2009
Era nuestro último día en la ciudad y nuestro vuelo a Madrid salía pronto por la tarde, así que nos quedaban sólo unas horas que dedicamos a visitar algunos lugares que se encontraban cerca del hotel.
Detrás del Obelisco de Constantino, osea en uno de los extremos del antiguo hipódromo, admiramos la fachada de la Universidad de Mármara, una de las más antiguas y prestigiosas de la ciudad:
Curioseamos por el Arasta Bazar, que se encuentra muy cerquita de la Mezquita Azul. Es un buen lugar para comprar alfombras o kilims (cojines), aunque tras curiosear un rato, decidimos no comprar nada, aunque se estaba realmente tranquilo comparado con el ajetreo del Bazar de las Especias o el Gran Bazar:
Fuimos caminando por el barrio de Ahirkapi, hasta llegar a la Mezquita Kucuk Aya Sofya (Pequeña Santa Sofía). También es conocida como Iglesia de San Sergio y San Baco. Es la típica joyita, lejos de los circuitos turísticos y que no visita casi nadie. La iglesia data del S. VI, aunque se convirtió en mezquita en el S. XVI, inspirándose en esta mezquita para la construcción de Santa Sofía (de ahí su nombre):
Su interior está cuidadosamente decorado con azulejos, del estilo de los utilizados por Sinan en la construcción de la sorprendente Mezquita de Rüstem Pasha:
Al ser poco turística, realizamos la visita nosotros solos:
La cúpula es una obra maestra de la arquitectura bizantina con 16 secciones, 8 planas y otras 8 cóncavas. Además se puede visitar la galería superior para apreciar los detalles de la decoración:
Por último, y para concluir la colección de mezquitas que habíamos visitado durante todos estos días, visitamos la Mezquita de Sokollu Mehmet Paşa, construida en 1572 por Sinan. Recibe su nombre por un estadista que ocupó el puesto de Gran Visir con tres sultanes (Solimán, Selim II y Murad III):
Una de las cosas que más llama la atención es su fuente de abluciones:
Creemos recordar que en el interior de esta mezquita no dejaban hacer fotos, pero había una cantidad increíble de azulejos de Iznik realmente bonitos.
Antes de llegar al hotel, pasamos por la colorida calle de Tavukhane Sokak con casas tradicionales:
Recogimos nuestras cosas en el hotel y fuimos al aeropuerto tomando el metro. Dejábamos atrás una fantástica ciudad, que nos había enamorado e inculcado el virus viajero para siempre. ¡ Gracias Estambul !. Seguramente la ciudad que más nos ha cautivado de todas las que hemos visitado hasta la fecha.
Esperemos que os haya gustado este diario y haberos animado a visitar la ciudad o servido de ayuda a planificar vuestro viaje. Os invitamos (y agradecemos) a que nos acompañéis en Facebook, Twitter e Instagram.
También nos podéis dejar cualquier comentario o pregunta, nos encanta ayudar a los demás, igual que muchos otros nos ayudan con sus relatos y experiencias.